Uno de los servicios más demandados por clientes es sin duda el sexo anal. A pesar de que no es imposible encontrar chicas escort que realicen dicho servicio, no es sencillo. Muchas veces las chicas no lo quieren hacer o cobran una tarifa aparte por ello, precisamente por ciertas dificultades que implica su práctica.
Es fundamental tomar las debidas precauciones al hacer sexo anal ya que se puede convertir en una pesadilla inolvidable. Incontadables son las historias surgidas de esta alternativa penetración, y por más que algunas veces puedan parecer divertidas, nadie quiere pasar por ellas, especialmente cuando alguien está pagando por ello como un servicio.
El ano esta "diseñado" para sacar cosas, no para meter, pero por alguna razón, la naturaleza se ha contradicho haciéndolo muy placentero, tanto para el sujeto activo, como también (después de mucha práctica) para el pasivo.
Es menester recordar que specialmente en el caso donde se realiza el sexo anal entre una trabajadora sexual y un cliente, al no ser una relación estable, es de gran importancia el uso de preservativo, ya que aunque no existe riesgo de embarazo, muchas enfermedades de transmisión sexual se contagian mediante el sexo anal.
Empecemos entocnes a enumerar y explicar brevemente las medidas indispensables para disfrutar al máximo el sexo anal.
Toda relación que tenga las características que nos citan a este post comienzan bastante antes con una limpieza del recto. Los enemas son excelentes para limpiar tu colon y tienen muchos beneficios adicionales. El enema es muy importante para minimizar cualquier complicación que pueda surgir durante la relación. Queremos que todo el trayecto y el interior por donde se va a realizar la penetración esté completamente limpio de manteria. Recodremos como dijimos anteriormente, que esta parte del cuerpo sirve para expulsar desperdicios de nuestro organismo, por lo que es importante dejar limpia la zona para que el cuerpo, en el intento de sacar materia, no tenga con qué trabajar y de esta manera poder disfrutar tranquilos de que ningun accidente va a ocurrir.
La manera más sencilla de realizar esto es comprando en la farmacia una pera de goma para introducir agua (preferentemente caliente) en la cavdidad anal. Ésto provocará las ganas de evacuar con más facilidad. Es importante en esta etapa utilizar un poco de lubricante para meter la punta de la pera de goma en el ano, para evitar lesiones. Es recomendable que, una vez se haya hecho la limpieza, esperar unas horas antes de tener relaciones, ya que la práctica misma del enema puede arrastrar en la evacuación un poco de la mucosa que protege las paredes de la cavidad. La ausencia de dicha mucosa podría hacer que el tejido sufra heridas durante la penetración. Esperando un tiempo damos lugar a que la flora intestinal se regenere. Finalmente recomendamos utilizar toallas húmedas neutras para limpiar toda la zona externa del ano.
Ya habiendo realizado toda la limpieza de la zona, damos lugar al acto en si, para el que también tenemos algunas prácticas saludables para llevar adelante. Por tratarse de un esfínter muscular, tiende a ofrecer resistencia, por lo cual debe procurarse una buena relajación corporal. Usar lubricantes es una buena manera de ayudar durante la relación y probablemente sea indispensable cada vez que se vaya a practicar. Cuanto más excitada esté la mujer, será más sencillo practicar sexo anal. Buscar un juego previo que ponga los ánomos acorde será vital. Más aumentará la libido y mayores será la disposición pore intentar nuevas cosas. Realizar la penetración de manera cuidadosa, suave y paulatina.
Después de haber tenido una relación anal, jamás permitas la penetración vaginal porque existe el riesgo de contaminar la zona con flora bacteriana. Una vez terminada la relación, higienizar la zona con agua fría y jabón neutro, para así eliminar todo remanente posible de lubricante.